Mi nombre es Carlos Valverde, tengo 37 años y vivo en España. Sufrí TOC hasta hace cerca de 15 años. Mi vida ha estado marcada desde la adolescencia por la ansiedad, el TOC y la ansiedad social.

En cuanto al TOC, hay claramente dos etapas en mi vida. La primera caracterizada por actos compulsivos de comprobación: cierre de puertas, ventanas, clavijas, luces, y la revisión meticulosa de la ubicación y orden de todas las cosas de mi habitación.

 

Y la segunda etapa, ya en mi etapa universitaria, con pensamientos intrusivos muy perturbadores, del ejemplo que pongo en muchos de mis vídeos; que me producían niveles muy elevados de ansiedad, culpa y depresión; hasta el punto de anular totalmente mi vida.

 

Estos pensamientos venían una y otra vez a mi mente, y cuanto más trataba de «apartar» o «reprimir» esos pensamientos perturbadores, estos más fuertes se hacían y más ansiedad me generaban. Siento tristeza al pensar en cómo la el TOC y la fobia social me amargaron esa etapa de la vida del instituto y la universidad, que se supone que debería ser la más bonita de la vida. Para mí no lo fue en absoluto. No era feliz, mi auto-estima estaba por los suelos y mi ansiedad y mi culpa por las nubes.

 

 

Pero a pesar de eso, sé que puedo sentirme afortunado porque he superado el TOC; porque lamentablemente la realidad es que hay muchas personas que no lo logran.  Sé que he perdido gran parte de mi juventud por culpa del TOC y de la ansiedad social, y después de curarme, entendí que sería bonito que mi experiencia y mi conocimiento pudiese servir para ayudar a otras personas a que también consigan curarse.

Pero reconozco que superar el TOC no es fácil. Mi empeño por superar el TOC y la ansiedad, el sufrimiento emocional y la profunda insatisfacción personal que sentía en mi vida; me llevó a interesarme por libros de psicología y crecimiento personal, por técnicas psicológicas alternativas durante varios años; y más tarde a hacer muchas de esas terapias y a buscar ayuda psicológica. Fue una etapa de pasarme miles de horas leyendo y aprendiendo durante varios años, y de probar todo tipo de terapias alternativas la mayoría de las cuales fracasaron. 

 

Pero fue mi negativa a resignarme a tener que vivir así toda la vida, lo que me hizo seguir buscando más y más información, y seguir probando más y más cosas. Y tras varios años, y muchos fracasos y decepciones, comencé a encontrar respuestas y a encontrar cosas que sí me fueron de ayuda. Algunas llegaron a mí a trvés de libros o webs, y otras a través de psicólogos. 

Mi curación fue muy progresiva, y no fue ni fácil ni rápida. Pero lo importante, es que conseguí curarme. Y quiero aprovechar esto para decir algo muy importante: NO TE PONGAS FECHA DE CURACION.

Es algo que no tiene ningún sentido, porque no sabes las dificultades y auto-sabotajes que te vas a encontrar en el caminio, y ponerse presión por curarse, es algo que no te ayuda.

 

Ahora, cuando echo la vista atrás y pienso en la horrible sensación de ansiedad que tenía frecuentemente, en los sentimientos de culpabilidad y depresión que me ocasionaba el TOC; o en la ansiedad y frustración que me causó la ansiedad social; me siento enormemente afortunado de haber superado esos problemas. Y al final, eso es lo realmente importanto, y no el tiempo que se tarda en curarse.

En mi caso personal, lo que más me ayudó a curarme, fue todo lo relacionado con la defusión cognitiva. Es decir, romper esa unidad conceptual entre identidad y pensamiento, aprender a no creer las cosas que me decían esos pensamientos intrusivos, no sentirme responsable de ellos, y no identificarme con ellos. En los mensajes que te recibirás en tu email si te has descargado los dos primeros capitulos , profundizo tanto en la teoría como en la práctica de todo lo relacionado con la defusión cognitiva.

 

Pero quiero hablar también de algunos de los errores que cometí. Mi primer gran error fue no pedir ayuda, no atreverme a buscar ayuda por no atreverme a contarle a un psicólogo, mis pensamientos intrusivos. Tuvieron que pasar varios años para sentirme capaz de hacerlo.

Y es que una de las peores etapas del TOC, es cuando uno no sabe que tiene TOC, y cree que se está volviendo loco y que es el único en el mundo al que le pasa algo así. Ahí piensas que es imposible que los demás puedan entender lo que sucede en tu mente, y más imposible aún, que puedan ayudarte.

 

El hecho de haber padecido el TOC y fobia social, y haberlos superado, me permite tener una comprensión de estos problemas mucho más exacta que aquella que puedan tener quienes no la han sufrido, y ello fue lo que me empujó a hacer esta página y compartir mi experiencia en Internet. Sé que eso es muy fácil de decir, pero si no me crees te invito a descargarte de forma gratuita los pdf del capítulo 1 y 2 de mi libro El Método LIBTOC y el pdf del caso de estudio.

Que los leas y que comiences también a leer los mensajes gratuitos que recibirás en tu correo electrónico. En ellos explico todo aquello que a mí me hubiese gustado que alguien me enseñase cuando yo estaba atascad0 en mis pores años de mi TOC. Y recuerda, esos mensajes son gratuitos y siempre lo serán.